Por qué se hace una cirugía de reparación del pulgar del esquiador

Si el ligamento está muy estirado o desgarrado, o si también se han lesionado otros tejidos y huesos de la zona, es posible que la lesión no sane por sí sola. Es posible que necesite operarse. Puede ayudar a que el ligamento se recupere y restablecer el movimiento y el uso completos del pulgar. 

Cómo se hace una cirugía de reparación del pulgar del esquiador

La cirugía suele hacerse de forma ambulatoria. Eso significa que volverá a su casa ese mismo día. Durante la cirugía:

• Le darán algún medicamento para que lo ayude a relajarse y prevenir el dolor. Quizás esté somnoliento o completamente dormido durante el procedimiento. También es posible que le hagan un bloqueo nervioso. Eso adormece el brazo durante la cirugía y por algún tiempo después.

• El cirujano hace un corte (incisión) en la base del pulgar.

• Usa puntos (suturas) para volver a conectar el ligamento con el hueso. Con frecuencia se usan también pequeñas anclas de sutura. También reparará las lesiones que haya en los tejidos que rodean el ligamento. Si hay una fractura en el hueso, es posible que el cirujano la repare con alambres o tornillos.

• Al terminar el procedimiento, le cerrarán la incisión de la piel con puntos.

• El médico le colocará una férula en la mano para mantener inmóvil el pulgar hasta que se recupere.

Riesgos de la cirugía de reparación del pulgar del esquiador

• Sangrado

• Infección

• Daño a los nervios cercanos, que puede producir entumecimiento y hormigueo

• Rigidez o rango de movimiento limitado en el pulgar

• Artritis