¿Cómo se diagnostica una TTN?

En primer lugar, un proveedor de atención médica escuchará el pecho del bebé o su ritmo de respiración. A menudo, una radiografía de tórax permite detectar el exceso de líquido en los pulmones y asegurarse de que no existen otros problemas que puedan estar causando dificultad para respirar. Los proveedores de atención médica pueden medir el nivel de oxígeno en la sangre del bebé con un dispositivo (pulsioxímetro) que se pega en la mano o el pie del bebé. O a partir de un análisis de sangre. Tanto el pulsioxímetro como el análisis de sangre permiten determinar si el bebé necesita oxígeno adicional.

¿Cuál es el tratamiento para la TTN?

Medidor de flujo de oxígeno, Cánula nasal

Máquina CPAP

Los proveedores de atención médica medirán el pulso, la frecuencia respiratoria y los niveles de oxígeno en la sangre del bebé. Esto ayuda a asegurarse de que estén dentro de un rango seguro. Los proveedores de atención médica le administrarán oxígeno al bebé por medio de lo siguiente:

• Una cánula nasal (tubos flexibles colocados debajo de las fosas nasales del bebé)

• Una campana de oxígeno (caja plástica transparente que se coloca alrededor de la cabeza del bebé)

• Una máquina de CPAP (presión positiva continua de las vías respiratorias). Esta máquina bombea una pequeña cantidad de aire a los pulmones del bebé de forma continua. Ayuda a mantener las vías respiratorias abiertas y libres de líquido. El aire se sopla a través de una mascarilla que se coloca sobre la nariz o a través de pequeñas pinzas de plástico que se introducen en la nariz. La CPAP se puede usar con o sin suplemento de oxígeno. 

¿Cuáles son los efectos a largo plazo?

En la mayoría de los casos, la TTN no causa complicaciones y desaparece dentro de 72 horas. Puede que no sea posible darle el pecho o el biberón hasta que el bebé pueda respirar con normalidad. No se conocen efectos a largo plazo en los pulmones del bebé. El proveedor de atención médica del bebé puede darle más información sobre su situación.