Reevaluar y reaprender

Puede ser difícil, pero el mejor punto de partida es tener una conversación sincera con usted. ¿Cómo han cambiado sus capacidades físicas? ¿Y sus habilidades de razonamiento? Este ejercicio permite reconocer campos en los que podría necesitar un poco más de ayuda o capacitación.

También asegúrese de hablar con el proveedor de atención médica. Dígale que quiere volver a conducir. Comparta sus preocupaciones. Podrá darle más información sobre si está listo o en qué debe trabajar. En algunos lugares, los médicos deben informar a las autoridades locales de manejo sobre los ataques cerebrales. Pregunte al proveedor cuáles son las reglas donde vive.

Elija su copiloto para la rehabilitación

No tiene por qué seguir este camino solo. Muchos centros de rehabilitación ofrecen programas de conducción diseñados para personas que se están recuperando de eventos médicos, como los ataques cerebrales. En estos programas, las clases de conducción se personalizan para abordar los desafíos más frecuentes después de un ataque cerebral, como los siguientes:

• Coordinación visomotriz

• Tiempo de reacción

• Conciencia del espacio

Además, los instructores experimentados podrán evaluar sus capacidades en situaciones en tiempo real.

Priorice la seguridad

Cuando retome el volante, siempre priorice la seguridad. Tenga presentes los siguientes consejos:

• Practique en un entorno controlado. Antes de tomar caminos muy transitados, pruebe conducir en zonas con menos vehículos para ver cómo se siente.

• Evite las distracciones. Apague la radio. No coma ni beba mientras conduce. También pida a quienes lo acompañen que se mantengan callados las primeras veces que conduzca.

• Sepa cuándo detenerse. Conducir después de tener un ataque cerebral puede suponer desafíos físicos y emocionales. Si se siente abrumado o inseguro, está perfectamente bien que se detenga de manera segura y que se tome un momento para recuperarse.

• Haga modificaciones. Quizá necesite modificaciones en el vehículo después de un ataque cerebral. Podría ser algo tan simple como agregar espejos más grandes o tan complejo como adaptar los controles del automóvil. Un especialista en rehabilitación puede ayudarlo a decidir qué es más práctico para usted.

Si necesita ayuda para pagar las modificaciones del automóvil, comuníquese con el fabricante del vehículo. O llame a la compañía aseguradora del automóvil. A veces, brindan ayuda para pagar estos cambios.

Celebre los hitos.

Cada paso adelante es parte de su camino para recuperar la independencia. Recuerde hacer lo siguiente:

• Celebre las victorias pequeñas. Incluso viajes cortos hasta la tienda de comestibles son algo de lo que puede sentir orgullo.

• Registre el progreso. Tomar notas sobre sus experiencias de conducción puede parecer una tontería, pero puede brindar mucha información. Verá lo lejos que ha llegado. Además, quizá detecte áreas que requieren trabajo.

• Mantenga la paciencia y una actitud positiva. Está bien si el proceso parece ir lento. El objetivo no es solo conducir, sino conducir de manera segura y con confianza.

Tener un ataque cerebral puede cambiar la vida en muchos aspectos, incluido cómo conduce. Pero con la ayuda y el soporte correctos, puede hacer los cambios que necesita para volver a conducir.